Las expensas comunes de edificios o complejos habitacionales cerrados sufrieron un ajuste de 9,08 por ciento durante enero y en los últimos doce meses de 181,45 por ciento, en ambos casos por debajo de la inflación.
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SUSCRIBITEEl ajuste del sector llegó a 181,45 por ciento en los últimos doce meses.
Las expensas comunes de edificios o complejos habitacionales cerrados sufrieron un ajuste de 9,08 por ciento durante enero y en los últimos doce meses de 181,45 por ciento, en ambos casos por debajo de la inflación.
Así lo mostró el último relevamiento publicado por la plataforma Octopus Prop Tech.
El costo laboral de los encargados de edificios de la ciudad de Buenos Aires representó el mes pasado el 30,08% de las expensas.
El alza de las expensas fue el mes pasado 11,52 puntos porcentuales menor a la inflación del 20,6%, en tanto el acumulado interanual se ubicó 72,75 puntos por debajo del 254,2% informado por el INDEC.
El valor promedio de las expensas de enero para los hogares fue de $66.618, monto que reflejan el promedio de todos los gastos del consorcio: salarios, abono de servicios, compras, servicios públicos, seguridad, limpieza, mantenimiento, honorarios profesionales, entre otros costos, indicó el análisis.
"Para este año se espera un comportamiento similar al 2023. Esto es que las expensas se vayan ajustando por detrás de la inflación", resaltó el director ejecutivo de Octopus, Nicolás Baccigalupo.
"Vemos que los ajustes siempre van un poco más lentos que el IPC (Índice de Precios al Consumidor)", subrayó el especialista.
De todos modos, anticipó: "Tal vez si se da un momento de mayor estabilidad y menor inflación veamos que las expensas se ajusten inclusive un poco por encima de la inflación y que los proveedores, que venían desfasados, recuperen los valores que traían desactualizados".
Baccigalupo lo identificó como "el gasto principal que históricamente se actualiza inexorablemente en línea con la inflación" dentro de las expensas, debido a que "tienen un sindicato", en referencia al Suterh, "que es de los más fuertes del país".
Asimismo, graficó que, como tendencia, "gran parte de los nuevos edificios pequeños, de tres o cuatro pisos, evitan la contratación de un encargado, optando en cambio por servicios de limpieza recurrentes".
"Esta estrategia, aunque reduce las horas de trabajo, elimina la relación de dependencia directa con el consorcio" y a su vez "puede generar complicaciones adicionales en caso de necesitar rescindir el contrato", manifestó el ejecutivo.
Por el contrario, precisó que "en el caso de grandes torres y edificios, la figura del encargado sigue siendo relevante, acompañada frecuentemente por la presencia de empresas de seguridad cuyos costos representan una proporción significativa del presupuesto del consorcio".