En el segundo semestre del año vence el plazo de concesión de cinco represas hidroeléctricas y el Gobierno trabaja en que vuelvan a manos del Estado y sean operadas conjuntamente con las provincias.
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SUSCRIBITEEn el segundo semestre del año vence el plazo de concesión de cinco represas hidroeléctricas y el Gobierno trabaja en que vuelvan a manos del Estado y sean operadas conjuntamente con las provincias.
La noticia se debatió en el encuentro de IDEA y obligó a que algunos de los presentes mantengan encuentros fuera de agenda con la secretaria de Energía, Flavia Royón, para aclarar el tema.
"No es un negocio rentable", reconocieron en off the record, pero resaltaron la necesidad de estar presente en las distintas aristas de la generación energética.
Uno de los aspectos centrales fue que las fuentes de trabajo (hoy generados por operadoras privadas) no se verían afectados por la estatización de las represas.
Sobre el tema, fuentes de la Secretaría de Energía de la Nación revelaron: "la línea de acción es que volverían al Estado nacional, pero queremos un esquema para las provincias".
Asimismo, se rechazó la posibilidad de prorrogar las concesiones durante un año una posibilidad con la que se especulaba
Neuquén y Río Negro tienen la mirada puesta en esa definición, ya que a partir de agosto empiezan a vencer los contratos de varias represas del Comahue
Se trata de los complejos hidroeléctricos de Alicurá (1.000 Mw) actualmente operada por la empresa AES Argentina; El Chocón (1.200 Mw) y Arroyito (120 Mw), a cargo de la firma Enel Generación; Planicie Banderita (450 Mw), operada por Oroazul Energy; y Piedra del Águila (1.400 Mw), a cargo de Central Puerto.
Todas tienen vencimiento de concesión previstos para el segundo semestre.
Estas centrales producen un 20% del total, indicaron operadores consultados durante el evento.