Las acciones de las empresas líderes que cotizan en la Bolsa de Comercio finalizaron la rueda del viernes con una suba de 0,71 por ciento y un Merval situado en los 1.727.776,56 puntos.
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SUSCRIBITESociedad Comercial del Plata, Transener e IRSA tuvieron los mejores números.
Las acciones de las empresas líderes que cotizan en la Bolsa de Comercio finalizaron la rueda del viernes con una suba de 0,71 por ciento y un Merval situado en los 1.727.776,56 puntos.
El índice general S&P BYMA tuvo un ascenso de 0,52 por ciento, hasta las 73.217.388,43 unidades.
El volumen de negocios operado en acciones fue de 45.104 millones de pesos (unos 46,5 millones de dólares).
Entre las líderes, las acciones que más subieron fueron las de Sociedad Comercial del Plata (5,17%), Transener (4,92%) e IRSA (3,88%).
Por el contrario, los papeles que bajaron fueron los de Loma Negra (-3,06%), Transportadora de Gas del Sur (-2,31%), YPF (-1,65%) y Metrogas (-0,44%).
A lo largo de la semana, el panel líder cayó un 5,2% en pesos, y un 6,2% en dólares (CCL), es decir, la peor performance semanal desde principios de agosto.
Por su lado, los papeles de las empresas argentinas (ADRs) cerraron dispares en Wall Street. IRSA avanzó un 4,1%; Tenaris, un 2,4%; y BBVA, un 1,7%.
En tanto, las principales mermas las anotaron los activos de Loma Negra (-4,5%); Transportadora de Gas del Sur (-2,1%); e YPF (-1,7%).
Los bonos nominados en dólares cerraron con altibajos este viernes, pero extendieron su racha positiva en el balance de los últimos días y lograron su tercera semana consecutiva con ganancias, aunque el riesgo país no logró perforar los 1.300 puntos.
Las pérdidas del día fueron lideradas por el Bonar 2041 (-0,9%); mientras que las subas fueron encabezadas por el Global 2038 (-1,3%).
Esto ubicó al riesgo país elaborado por JP Morgan apenas por encima de los 1.310 puntos básicos (en 1.311 puntos).
A lo largo de la semana, el indicador registró una baja de 0,6 por ciento.
Wall Street cerró este viernes en terreno mixto pero logró acumular ganancias semanales en sus tres principales indicadores, entre los cuales destacó el Dow Jones con un nuevo récord.
Al término de la sesión, el Dow subió un 0,33% y se situó en un nivel nunca visto de 42.313 puntos, mientras que el S&P 500 bajó un 0,13%, hasta 5.738 unidades, y el Nasdaq cedió un 0,39%, para quedar en 18.119 enteros.
En el cómputo semanal, el Nasdaq ganó un 1% y tanto el Dow Jones como el S&P 500 en torno al 0,6%.
La jornada estuvo marcada por el índice de precios de gastos de consumo personal (PCE), la medida de inflación más seguida por la Reserva Federal, que bajó en agosto al 2,2% en tasa anualizada.
La mejora de los precios está en línea con lo esperado por la Fed, que este mes bajó tipos de interés por primera vez en cuatro años dando inicio a un esperado nuevo ciclo en política monetaria.
Ayer se publicó el dato definitivo del crecimiento del segundo trimestre del Producto Interior Bruto (PIB), que se mantuvo en el 3 % interanual, en una nueva señal de buena salud económica.
En cuanto al mercado laboral, las solicitudes de subsidio por desempleo bajaron a 218.000 la semana pasada.
Por sectores, hoy se destacó la suba de las empresas de energía (2,11%), y servicios públicos (1,01%) frente al descenso de las tecnológicas (-0,96%).
En el Dow, el mayor avance fue para Chevron (2,46%) y Visa (1,28%), y el mayor descenso para Amazon (-1,66%) y 3M (-1,53%).
Al cierre de la bolsa, el rendimiento del bono a 10 años bajaba al 3,756%, el oro bajaba a 2.674 dólares la onza y el euro se cambiaba a 1,1166 dólares.
El precio del petróleo intermedio de Texas (WTI) subió este viernes un 0,75%, hasta 68,18 dólares el barril, pero cierra la semana con una pérdida del 5% por la expectativa de que Arabia Saudita aumente su producción de crudo.
Al término de la jornada en la Bolsa Mercantil de Nueva York (Nymex), los contratos de futuros del WTI para entrega en noviembre, el nuevo mes de referencia, sumaron 0,51 dólares con respecto a la sesión anterior.
Los precios cierran la semana a la baja al imponerse las perspectivas de una mayor oferta global al recrudecimiento del conflicto entre Israel y Hizbolá en el Líbano, o a las últimas noticias positivas para el estímulo de la demanda en China.
El Financial Times publicó el jueves que Arabia Saudita quiere dejar el objetivo de los 100 dólares el barril, en una señal de que el país está resignado a un período de precios del petróleo más bajos, según personas familiarizadas con el mayor exportador de crudo del mundo.
Fuentes de la Organización de Países Exportadores de Petróleo y aliados (OPEP+) confirmaron a la prensa especializada que no existe un precio objetivo específico para el crudo y que basan su estrategia en los fundamentos de mercado y en los inventarios globales de petróleo a cinco años.
Por otra parte, este viernes el banco central de China redujo los tipos de interés e inyectó liquidez al sistema bancario mientras Pekín prepara estímulos para llevar el crecimiento económico hacia el objetivo del 5% en 2024, lo que podría impulsar la débil demanda de crudo del gigante chino.
En otros mercados, los contratos de gas natural para entrega en noviembre subieron a 2,90 dólares por mil pies cúbicos y los contratos de gasolina con vencimiento en octubre bajaron a 1,95 dólares el galón.
El barril del petróleo Brent, de referencia en Europa, cerró este viernes en el mercado de futuros de Londres al alza, pues creció un 0,53%, hasta los 71,98 dólares.
El crudo del mar del Norte, de referencia en Europa, aumentó 0,38 dólares respecto a la última negociación en el Intercontinental Exchange (ICE), cuando terminó en 71,60 dólares.
El Brent recuperó terreno, aunque todavía permanece lejos de la barrera de los 75 dólares que superó esta semana después del anuncio del programa de estímulos económicos anunciado por China, uno de los mayores consumidores de petróleo.
La bolsa de São Paulo cedió un 0,21% al cierre de la sesión de este viernes, pero acumuló un alza semanal del 1,27%, tras la divulgación de datos positivos en materia de estimaciones de crecimiento y empleo de la economía brasileña.
El Ibovespa, índice referencia del parqué brasileño, acabó con 132.730 puntos básicos y, aunque la semana fue positiva de forma global, no terminó de recuperar la caída del 2,8% que registró en la anterior.
En el mercado de divisas, el dólar estadounidense se depreció un 0,12% y terminó cotizado a 5,436 reales para la compra y 5,437 reales para la venta en el tipo de cambio comercial brasileño.
En la semana, el billete verde bajó un 1,5% con respecto a la divisa brasileña.
Los agentes de bolsa recuperaron cierto optimismo con la divulgación de nuevos datos macroeconómicos en Brasil.
Este viernes, el Gobierno informó que la tasa de desempleo cayó a un 6,6% de la población activa en el trimestre concluido en agosto, lo que supone el nivel más bajo de los últimos diez años y medio.
El jueves, el Banco Central elevó casi un punto la previsión de crecimiento del país para este año, desde el 2,3% al 3,2%, porcentaje que, de confirmarse, superaría la expansión del producto interior bruto (PIB) de 2023, que fue del 2,9%.
Todo esto, más las mejores percepciones en torno a la economía de China, animaron a los operadores financieros, aunque este viernes se abonaron al rojo en una sesión de recogida de ganancias tras avanzar casi un 1,1% en la víspera.
Los valores que más perdieron en la sesión fueron CSN Mineração (-3,3%), la aeronáutica Embraer (-2,9%) y Usiminas (-2,5%).
Por el contrario, al frente de las ganancias en el Ibovespa se ubicaron los papeles de la operadora de planes privados de salud Qualicorp, que se dispararon un 15,7%.
El volumen financiero en el parqué paulista sumó hoy 22.800 millones de reales (unos 3.800 millones de euros), en 3,7 millones de operaciones.