El Gobierno espera inversiones por al menos 30.000 millones de dólares para el sector energético en los próximos dos años.
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SUSCRIBITELo afirmó el secretario Rodríguez Chirillo durante el evento de una empresa del sector.
El Gobierno espera inversiones por al menos 30.000 millones de dólares para el sector energético en los próximos dos años.
Esto se dará a partir de los incentivos otorgados a las firmas del sector y la implementación del RIGI.
“Sin Ley de Bases hemos conseguido récord de producción en petróleo y gas. Estas reglas van a hacer que se consoliden las inversiones que actualmente están en desarrollo que para 2025 serán US$ 12.500 millones y para 2026 US$ 14.000 millones", subrayó el funcionario.
Y aclaró: "Si le sumás el RIGI, en 2025 van a ser US$ 2.500 millones y en 2026 otros US$ 2.500 millones”.
El secretario se presentó en la mañana del martes en un evento en el que se celebraron los 110 años de la petrolera Shell.
En ese contexto, explicó que encontraron un “sistema colapsado” y que se tomó la decisión de reconfigurar la tarifa para dar cobertura al costo de servicio y los subsidios del Estado para ayudar a la macroeconomía.
“La gente había dejado de ver el precio real de la energía”, afirmó Rodríguez Chirillo.
Chirillo señaló que “en el cambio de modelo apostamos a los privados en los mercados competitivos y a las inversiones en infraestructura”.
El funcionario afirmó que “el RIGI es un complemento adicional para el sector energético y es fundamental porque otorga estabilidad, beneficios, seguridad jurídica y lo que busca son proyectos que de otra manera en la Argentina de hoy no se harían porque no se dan estas condiciones”.
En materia de hidrocarburos, valoró el cambio “en el objeto de la ley, ya que ahora buscamos maximizar la renta, lo que significa que aprovechamos la ventana de oportunidades que se va cerrando en el tiempo”.
“Las empresas tiene el derecho a la libre comercialización al exterior, será por ductos inicialmente, después por barcos y terminales de GNL", manifestó el secretario.
"Es un derecho de las empresas, es una reforma de fondo que busca bajar el riesgo del negocio para no depender de una autorización precaria que te la cortan en cualquier momento, esto es lo que va a permitir hacer contratos de largo plazo”, concluyó.