El sueño de muchos empresarios exitosos es expandir su negocio a través del modelo de franquicia.
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SUSCRIBITEUna práctica que puede tener graves consecuencias y es imposible de erradicar por completo.
El sueño de muchos empresarios exitosos es expandir su negocio a través del modelo de franquicia.
Sin embargo, este camino puede estar lleno de desafíos inesperados, uno de los más comunes y perjudiciales es el fenómeno de los franquiciados piratas.
Estos franquiciados, que firman un contrato y se comprometen a seguir las directrices y estándares de la marca, toman una decisión catastrófica para la marca, que puede tener un impacto enorme en la reputación y finanzas de la compañía.
Al franquiciar un negocio, la consistencia en la calidad de los productos y servicios es fundamental para mantener la integridad de la marca.
Muchas franquicias exigen a los franquiciados que le compren a ellos todos los productos y excluyen otro tipo de productos.
Por ejemplo, una franquicia de helados exige que solo le compre a la marca y prohíbe sumar otros productos como panchos o hamburguesas.
¿Qué hace un franquiciado pirata?
Si bajan las ventas, incluyen panchos sin consultar a la marca.
Entonces, vos empresarios que llevas años creando un concepto, si no controlas este tipo de cosas, terminas liderando una franquicia cambalache. Donde da todo lo mismo.
En otros casos, los franquiciantes permiten a su red adquirir productos en proveedores homologados.
¿Qué ocurre?
Los franquiciados se comprometen a comprar productos de proveedores homologados para asegurar que los estándares de la empresa se mantengan en todas las ubicaciones.
Sin embargo, algunos franquiciados reciben ofertas tentadoras de productos más baratos y, en un intento por ahorrar dinero, optan por estos proveedores alternativos.
Esta práctica puede tener graves consecuencias:
1. Pérdida de Calidad: Los productos de proveedores no homologados pueden ser de menor calidad, lo que afecta directamente la experiencia del cliente.
Si el sabor, la apariencia o la funcionalidad de un producto no cumple con las expectativas del cliente, la reputación de la marca sufre.
2. Destrucción de la Propuesta Comercial: La consistencia es clave en una franquicia. Si los productos varían de una ubicación a otra, los clientes pueden perder la confianza en la marca, optando por la competencia.
3. Pérdida Financiera: La marca pierde dinero cuando los franquiciados no compran a los proveedores homologados, quienes suelen ofrecer descuentos o incentivos basados en el volumen de ventas.
“El secreto para evitar este tipo de actitudes es el control. Y hacer seguimiento y visitas a los locales", dice Carlos Canudas, consultor experto en desarrollo de franquicias en Argentina y gran parte de América.
"El problema que muchas marcas, tal vez no cobran un fee muy grande para financiar estos controles y es donde hoy, gracias a la tecnología, se pueden implementar controles efectivos más con ingenio y astucia que con dinero”. precisa.
1. Auditorías Regulares: Realizar inspecciones y auditorías regulares en las ubicaciones de los franquiciados puede ayudar a detectar cualquier uso de productos no homologados.
Estas auditorías deben ser tanto programadas como aleatorias para asegurar el cumplimiento continuo.
2. Sistemas de Rastreo: Implementar sistemas de rastreo y monitoreo que permitan a la marca verificar la procedencia de los productos en cada ubicación.
Esto puede incluir el uso de tecnologías como códigos QR, blockchain o sistemas de gestión de inventarios centralizados.
3. Educación y Entrenamiento: Capacitar a los franquiciados sobre la importancia de mantener los estándares de la marca y los riesgos asociados con el uso de productos no homologados.
Proveer información clara sobre las consecuencias financieras y de reputación puede disuadir a los franquiciados de recurrir a proveedores no autorizados.
4. Incentivos y Penalizaciones: Ofrecer incentivos a los franquiciados que se adhieren estrictamente a las directrices de la marca y penalizar a aquellos que no lo hacen.
Los incentivos pueden incluir descuentos adicionales, soporte adicional o programas de reconocimiento. Las penalizaciones deben ser claras y aplicarse consistentemente.
5. Soporte Constante: Brindar soporte continuo a los franquiciados, ayudándoles a entender que cumplir con los estándares no solo beneficia a la marca, sino también a su propio éxito.
Mantener una comunicación abierta y ofrecer soluciones alternativas puede reducir la tentación de buscar proveedores más baratos.
Carlos Canudas ofrece un ejemplo esclarecedor para ilustrar las consecuencias de no seguir las directrices de la marca: “Hay un caso muy bueno para ilustrar las consecuencias que los franquiciados no analizan y pueden poner en riesgo su negocio.
McDonald's, para aprovechar el buen clima, sumó sillas y mesas de plástico. Cuando los franquiciados vieron el precio de las sillas se quejaron. Y la marca respondió: ‘¿Y qué pasa si por comprar sillas baratas, se rompe una pata, un chico se cae y se rompe la cabeza y les hacen un juicio a ustedes?’ Por eso, es muy importante que la marca sepa explicar por qué los proveedores que ellos eligen tienen un sentido”.
Además, comenta sobre cómo las franquicias de cafeterías han enfrentado problemas similares: “Esto ocurrió mucho con franquicias de cafetería donde se desvirtuaba el concepto. Por ejemplo, la cafetería vendía mucho a la mañana y a la tarde, pero al mediodía no. Entonces, el franquiciado, sin consultar a la marca, agregaba almuerzo. Y en vez de entrar y sentir el aroma a café, se sentía el aroma a tuco”.
Aunque parezca muy lejano y raro, la mayoría de las franquicias sufren las consecuencias de los franquiciados piratas y muchas situaciones como estás terminan en cartas documento o echándolos de la marca.
En definitiva, una franquicia no es más que un negocio de personas, de modo, que si vas a franquiciar tu negocio, este tipo de actitudes y situaciones las tenés que tener en cuenta.
Son imposibles de erradicar por completo, pero controlando como corresponde, podemos minimizar de forma drástica su impacto.