Morgan Stanley destacó el potencial de crecimiento del crédito en la Argentina debido a que el país reúne “condiciones adecuadas” para una expansión sostenida.
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SUSCRIBITELa proyección surgió luego del resultado de las elecciones legislativas.
Morgan Stanley destacó el potencial de crecimiento del crédito en la Argentina debido a que el país reúne “condiciones adecuadas” para una expansión sostenida.
El pronóstico llegó tras conocerse el resultado de las elecciones legislativas del domingo, que sirvió para consolidar el poder del oficialismo en el Parlamento.
“Un entorno económico más constructivo podría convertir a Argentina en el mercado bancario de más rápido crecimiento de la región”, indicó la entidad financiera estadounidense.
A su vez, comentó que “el país reúne las condiciones adecuadas para sostener un período prolongado de crecimiento del crédito, entre ellas: baja penetración financiera, bancos bien capitalizados y una amplia clase media con poder adquisitivo”,
“El crédito bancario en Argentina atravesó un largo período de estancamiento debido a políticas macroeconómicas débiles durante dos décadas”, dijo la multinacional en un informe a sus clientes.
En ese sentido, Morgan Stanley indicó que “la proporción de consumidores de ingresos medios y altos es significativamente mayor: aproximadamente el 61% de la población, frente al 46% en Brasil y alrededor del 30% en México, Perú y Colombia”.
“Esto facilita y acelera el proceso de bancarización, ya que este segmento suele tener empleos formales (con salarios bancarizables) y cuentas o depósitos activos", añadió.
"La penetración del crédito parece particularmente reducida si se ajusta por nivel de riqueza de los consumidores”, consideró Morgan Stanley.
El presidente Javier Milei aseguró que buscará consensos para avanzar en las reformas estructurales y anticipó que primero se propondrán las modificaciones en materia laboral e impositiva y luego será el turno de la previsional.
El Jefe de Estado indicó que en el ámbito tributario, el Gobierno impulsa un plan que incluye “bajar alícuotas de 20 impuestos y expandir la base imponible”.
La estrategia de reducir alícuotas busca que “no tenga sentido la evasión, liberando recursos al sector privado”, argumentó.
En una entrevista televisiva, Milei aseguró que “si el programa fiscal diseñado por el ministro Caputo continúa, se estaría "devolviéndole a los argentinos US$ 500 mil millones hasta el 2031”.
Respecto a la reforma previsional, definió que “solamente se puede encarar seriamente cuando uno recompone el mercado de trabajo, sino es mentirle a la gente”.
La modernización laboral se centra en modificar el régimen vigente, el cual Milei calificó de “anacrónico”.
El Presidente enfatizó que la propuesta no afecta los derechos existentes: "No, no vamos por los derechos de nadie".
El proyecto contempla mantener la opción de los contratos actuales para quienes deseen seguir utilizándolos, especificando que los insiders (los que ya están en el mercado formal) probablemente querrán seguir con ese contrato.
El enfoque principal es dar "flexibilidad a los outsiders", buscando que quienes se encuentran en el sector informal puedan "encontrar algún sistema acordado entre las partes para ser formal", especificó.
Según la visión del Ejecutivo, esta formalización permitiría “duplicar la cantidad de trabajadores haciendo aportes” y consecuentemente, esto significaría “el doble de ingresos disponibles para pagar jubilaciones, para pagar mejores jubilaciones”.
Para concretar las medidas, JM reconoció la necesidad de diálogo con los gobernadores y el poder legislativo.
"Nosotros ya tenemos borrador de todas las reformas y ahora necesitamos es sentarnos con un nuevo Congreso y buscar los acuerdos para salir adelante", indicó el mandatario.
Milei sostuvo que las reformas que se proyectan están integradas en el marco del Pacto de Mayo y que ya se están bosquejando en las reuniones que se celebraron en los últimos meses.
Por otra parte, manifestó su disposición a negociar con las autoridades provinciales, asegurando: "Estoy dispuesto a sentarme con los gobernadores" y enfatizó que no tiene "problema con ninguno de ellos".
“Hay dos tercios de los argentinos que quieren eso”, concluyó.
