En una entrevista con Somos Pymes Radio (La Red AM 910, domingos de 6 a 8 hs), Nicolás Visentin, dueño de KOI, contó cómo la empresa gastronómica logró asentarse en los últimos a través de la profesionalización de sus procesos.
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SUSCRIBITECon siete años de historia, la firma se abrió paso en el mercado argentino combinando la cocina tradicional asiática con los sabores argentinos.
En una entrevista con Somos Pymes Radio (La Red AM 910, domingos de 6 a 8 hs), Nicolás Visentin, dueño de KOI, contó cómo la empresa gastronómica logró asentarse en los últimos a través de la profesionalización de sus procesos.
Motorizada por la idea de sus fundadores, la PyME logró popularidad a través de productos de calidad únicos en el mercado vernáculo.
En el inicio de la charla, Visentin relató cómo fueron los inicios del proyecto y las enseñanzas que recogió en el camino para alcanzar el éxito junto a su amigo de la infancia.
"Hace siete años, mi socio -a quien conozco desde los cuatro años- me terminó convenciendo para que pongamos nuestro primer local gastronómico en Carranza y Gorriti (Palermo) a puro pulmón", describió.
"Desde el principio todo fue muy cuesta arriba y fuimos aprendiendo como lidiar con los empleados, proveedores y flujo de caja. Luego agregamos un tercer socio para manejar mejor el tema del presupuesto", resaltó.
Y alcaró: "De a poco nos fuimos profesionalizando y actualmente tenemos cuatro locales propios, dos franquicias -con una nueva que está por salir en La Plata-, más un local de waffles y comida dulce que inauguramos en Villa Crespo".
"Al ser chef, me gusta que los productos salgan a la perfección y manteniendo siempre la calidad, algo que es muy importante para el éxito de un negocio gastronómico", manifestó el emprendedor en el programa que conduce Christian Dátola.
"Hace un año que pudimos terminar la planta de producción en La Paternal, que nos permite abastecer a todos los locales con el mismo producto. Esto es clave para que las franquicias puedan tener una estandarización", subrayó.
Y añadió: "Tenemos procesos automatizados porque creemos que esa es la manera para que llegue perfecto todo".
Visentin explicó que "KOI es una fusión de lo que es el producto tradicional asiático con la impronta y los sabores de Argentina. Un ejemplo de eso es el dumpling de provoleta, molleja o cordero, que no se encuentran en el barrio chino".
"La empresa funciona con cuatro socios y cada uno representa una pata de la mesa: yo estoy en producción, carta y cocina; otro socio se ocupa de los recursos humanos, Sebastián se encarga de administración y finanzas; y Juan, mi amigo que trajo el proyecto luego de verlo en Boston y Chicago", ilustró.
Según el emprendedor, "la publicidad es un eje principal en nuestro modelo de negocios. Invertimos entre un 5 y un 10 por ciento de la facturación en tener presencia en medios gráficos y redes sociales".
"Tenemos campañas de fotos enormes y videos que salen en los cines. La experiencia de KOI es afrodisíaca. El animé es algo muy marcado en nuestro negocio. Eso es algo que no está en ningún lado", exclamó.
El fundador de KOI contó que "la mayor parte de los productos son armados manualmente, lo que le da la impronta a nuestra marca".
Y puntualizó: "Acabamos de firmar un contrato con 'Franquicias que Crecen' que nos va dar un plus de profesionalismo para poder crecer vertiginosamente".
"Ante la crisis económica, decidimos aumentar la porción por el mismo precio. Nuestro ramen aumentó su volumen y la gente puede comer más invirtiendo lo mismo, para que nos siga eligiendo", concluyó Visentin.
Redacción: Mauro Torres.